Cuestión de gusto. Una visita a Barcelona del auditor de la Rota Antoni Despuig, en el año 1785

Resumen

Por primera vez se edita un texto autobiográfico en que el auditor de la Rota Antoni Despuig relata una visita efectuada a Barcelona en el año 1785. Sus opiniones sobre la arquitectura y las decoraciones pictóricas que estaban en boga en la ciudad son especialmente críticas. Como hombre ilustrado vinculado a la Academia de San Fernando y a la Escuela de Dibujo de Mallorca, censura la pintura de Francesc Pla, el Vigatà, y de Manuel Tremulles, que contrapone a la de los discípulos de la Escuela Gratuita de Dibujo, dirigida por Pasqual Pere Moles, y en particular a la producción de Pere Pau Muntanya. El texto plantea un dilema: las impresiones de Despuig, ¿son solo una manifestación de gusto personal o constituyen el reflejo de un debate estético más profundo? Y, en este caso, ¿hay que revisar los planteamientos que la historiografía local ha aceptado como a válidos hasta ahora?